miércoles, 16 de marzo de 2011

La correcta comprensión de la actual tranformación planetaria - Trigueirinho



La fase entre ciclos evolutivos de un planeta tiene amplia repercución en el universo que el engloba y más allá. Es un período delicado de ajustes y transformaciones, en el cual las energías se expresan diferentes de los tiempos normales, en especial las leyes de la naturaleza, y siempre se forma una coyuntura adecuada a avances y actualizaciones imposibles en otros momentos

Asi como el amanecer y el crepúsculo no son ni el día ni la noche, tampoco una mezcla, cada transición planetaria posee sus peculiaridades. Siempre ocurren alteraciones magnéticas que afectan todo el orbe, tornando viable una mayor aproximación entre el mundo visible y el invisible.

Pasajes que unen esos mundos quedan más acesibles y sus habitantes son contactados más facilmente.

Transiciones planetarias son oportunidades de elevación. Los que las ven con inteligencia y voluntad de transformarse y progresar rumbo a lo desconocido, sintetizan experiencias y concientizan la nueva escala vibratoria.

Estamos en el umbral de una nueva humanidad, de un nuevo planeta. Esa transformación viene siendo preparada hace milenios y se hace notar sobre todo en los últimos tiempos, muchas personas la comprenden y con ella colaboran.

La transición actual de la Tierra se caracteriza por la purificación y renovación de su superficie y conducción de los seres para caminos evolutivos según las leyes que pasaran a regir la existencia en un ciclo venidero. Se efectuan cambios profundos, algunos aún invisibles, tales como la sutilización de la substancia material, selección cuantitativa y cualitativa de los integrantes de los reinos de la naturaleza, cambio en la inclinación del eje magnético del globo, reconfiguración de los continentes y mares, implante de un nuevo código genético en parte de la humanidad que proseguirá aquí o en mundos más adelantados, restructuración de los niveles de conciencia, relación abierta de los seres humanos con civilizaciones que viven en otras dimensiones y mayor integración del planeta entero en la vida solar, intergaláctica y cósmica

Esa transición corresponde al importante avance de la Tierra como ser planetario que pasará a ser regido por leyes evolutivas superiores. El estado de lucidez que siempre fué de apenas unos pocos iniciados, será alcanzado por toda la humanidad futura. La ley del karma, hasta hoy activa como agente equilibrador de la vida en planos materiales, será superada.

La transición de la Tierra se constituye de etapas. La etapa de purificación y los últimos enfrentamientos entre las fuerzas del caos redundan en amlia destrucción externa de origen nuclear y/o natural. seres que no deben sucumbir a ese enfrentamiento seran rescatados. En otra etapa, algunos de los que fueron trasladados para otros mundos regresan para la reconstrucción de la superficie del planeta e inicio de una nueva civilización.

Tal cambio es conducido por inteligencias intergalácticas, por energías suprafísicas y entidades de mundos intangibles que existen en el interior del planeta. Esas conciencias representan leyes inmateriales que deben regir la vida del ser humano terrestre.

Paralelo a ese movimiento liberador están los obscuros, organizados por el poder que rige el materialismo de la presente civilización y representado por los que controlan la vida externa y manipulan la conciencia de las masas.

En los niveles internos de la existencia está asegurada la continuidad de la Tierra en condiciones de armonía e integridad del órden cósmico, y los que son receptivos a la vida espiritual e interior, preciben eso de forma inequívoca e intuitiva en los niveles profundos de si mismos.

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